Un sorpresivo ataque de tristeza

Esta mañana me he levantado
del lado equivocado de la cama
y me he caído mal
al mirarme al espejo en el baño.
Esta mañana he roto un maleficio
y he decidido no ir a desayunar
para variar me he cambiado de calzoncillos
y aun así no he podido parar de soñar,
me he vuelto a la cama.
El tiempo grita,
dibujamos las palabras como si fueran nuestras
el viento me incita,
ponemos nombres a las cosas sin buscar un porque,
sin buscarles una salida
y estás a mi lado dormida.
Nos dejamos un millón de preguntas sin contestar
y pareces tan decidida.
esta mañana tuve una gran sorpresa,
vi un inmenso abismo de tristeza
y tener que saltar los dos?
Dejarnos atrás un pedazo de algo
y vemos al otro lado la puerta de salida,
pero era mirar abajo
y no parar de soñar,
era seguir mirando
y volar callados hasta estrellarnos
y caer, y seguir, y soñar, y volar
y caer y no parar hasta estrellarnos.